Los periodistas parlamentarios y los enviados por los medios catalanes para cubrir el retiro del PSOE y los partidos impulsores de la reforma del estatuto se han topado con la nueva estrategia Marín de relaciones con la prensa: información a cuentagotas.
El maratón negociador se celebra en el nuevo edificio de ampliación del Congreso, donde la zona de despachos y la ocupada por las comisiones (como la Constitucional, encargada del proyecto de estatuto) no son accesibles para los periodistas. Los reporteros ni siquiera pudieron sonsacar información a los negociadores a la hora de la comida, ya que almorzaron en el nuevo restaurante del edificio, reservado de la voracidad de los cronistas.
Por eso no ha habido filtraciones ni noticias del achuchón impuesto por las prisas del presidente Zapatero para sacar adelante un compromiso aceptable para todos antes del Comité Federal del PSOE, donde el próximo sábado el presidente del gobierno quiere tranquilizar a su partido.
Muchas caras largas, mucha espera, mucho pasillo y mucha calle en el primer día de maratón negociador. Las viejas costumbres de pasilleo y asalto a cada salida de las salas de reuniones y los despachos ya son pasado. La higiene informativa impuesta por el presidente del Congreso, Manuel Marín, impera y cubre nuestra política parlamentaria de un manto de silencio.
Ahora, café para todos. Ruedas de prensa con mensaje tasado, preparado e igual para todos. Las viejas mañas de los reporteros parlamentarios quedan para el móvil, si las fuentes lo cogen. Y sobre todo para los mensajes SMS, porque muchos diputados y negociadores han abrazado las nuevas tecnologías y sólo responden preguntas concretas con respuestas cortas y concisas.
P21 | Estatutos resguardados de la prensa
P21 | Fuera reporteros del pasillo del Congreso