La participación distingue a la televisión 2.0 de la convencional y los internautas comparten sus gustos con la televisión temática.
La TV en internet es una revolución frente al máximo ejemplo de la comunicación de masas, el uno a muchos (broadcasting), pero estamos todavía en los albores de un nueva alfabetización audiovisual diferente a la herencia de la televisión tal como la hemos vivido hasta ahora.
Los resultados de una encuesta sobre televisión y vídeo en internet (televisión IP, vídeo social y TV móvil) realizada por The Cocktail (documento en pdf) muestran que la revolución de la televisión personal, la nueva identidad audiovisual, está todavía en la infancia.
Pero se confirman todas las reflexiones y datos recientes: gran parte del futuro de internet es audiovisual y la televisión cambiará irremediablemente con la convergencia con internet.
Las redes de vídeo social son ya parte de la programación fundamental y del consumo básico de la televisión a través de la Red.
Casi la mitad de los más jóvenes (16 a 24 años) visitan sitios de vídeos online frecuentemente. Entre los 25 y los 44 años, la franja de audiencia más importante, la mitad de los internautas ven ya con cierta asiduidad vídeos de sitios alimentados por los propios internautas y también por las televisiones, que cada vez distribuyen más contenidos a través de las redes sociales.
La tasa de participación crece entre los mayores de 25 años. La composición de la muestra elegida para la encuesta (internautas frecuentes) tiene mucho que ver. Los menos de 24 años ven muchos vídeos colgados por otros. Los mayores de esa edad ven muchos menos y aumenta la actividad de aportadores a esas redes, tanto con contenido propio como por vídeos seleccionados de televisiones, publicidad, etc.
La superación de la tiranía de la programación demuestra la mayor exigencia de los telespectadores de TV por internet. Son consumidores compulsivos de televisión y la mitad de quienes navegan más de tres horas diarias por internet también ven más de ese tiempo de televisión. Una diferencia con los internautas menos intensivos y los jóvenes, que ven menos televisión y la sustituyen por internet, aunque también consuman contenido audiovisual en la Red.
La autoprogramación de los internautas es muy similar a la de la televisión de pago temática. Los contenidos preferidos -con diferencias entre edades y sexo a veces importantes- son las películas, los informativos, las series y los deportes.
Es una televisión temática en busca de contenidos de calidad: informativos (en sentido amplio) y de ficción frente a la abundancia de reality shows y tertulias, los viejos talk shows, que plagan la televisión generalista en abierto.
El consumo individual de la televisión en el ordenador es responsable de la demanda de esos contenidos y de la propia implantación de la televisión por internet.
La convergencia de acceso a internet entre televisión y ordenador todavía está lejos, a pesar del aumento de penetración de la televisión IP y de una implantación de la TDT más fundada en la recepción tradicional que en las posibilidades digitales e interactivas de esa plataforma.
La televisión en el móvil es todavía muy incipiente. Tres de cada diez internautas usuarios de 3G han visto algún contenido en su móvil. Pero la experiencia se limita todavía a los early adopters y la satisfacción dista de ser la adecuada.
La televisión comienza a ser más personal. La autoprogramación anhela contenidos de calidad con un menú básico de ficción (películas y series), información y deportes más allá de los géneros más programados por las cadenas generalistas y donde la participación a través de la selección de vídeos (propios o ajenos) de los televidentes es ya un elemento de primera importancia.
The Cocktail | Televidentes 2.0
P21 | El futuro de la televisión
P21 | Wikiartículo | La televisión es personal