En el Partido Popular dan por hecho que Mariano Rajoy no contestará a preguntas mañana tras su entrevista con el presidente José Luis Rodríguez Zapatero. Otra vez las declaraciones institucionales amenazan a la información tras una reunión clave para el futuro y posible fin de la violencia de ETA en Euskadi.
Falta la decisión de La Moncloa y del secretario de Estado de Comunicación, Fernando Moraleda, pero todo apunta a que Rajoy y la vicepresidenta María Teresa de Fernández de la Vega no se someterán al interrogatorio de los periodistas.
Nada más conocerse el comunicado de ETA el pasado día 22, sólo el presidente contestó preguntas tras su comparecencia en el Congreso.
Antes, Rajoy, la vicepresidenta De la Vega y el portavoz parlamentario socialista Alfredo Pérez Rubalcaba no lo hicieron.
En temas tan delicados y con el país a la espera de conocer las ideas de sus dirigentes, hay preguntas difíciles y sin respuesta, pero no inadecuadas.
Cada día se olvida más la obligación de transparencia del poder público con los ciudadanos.
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