Los diputados nacionales ya están casi totalmente digitalizados. Hace algo más de una semana recogieron sus PDA´s y sus firmas electrónicas, los dos últimos pasos de la transformación digital del Congreso de acuerdo al plan Marín.
La política española se está tecnologizando rápidamente, aunque en muchos casos para sacar más partido de la propaganda y sin una auténtica apertura ni una ciberpolítica más democrática. Por recursos no será. Es la hora de la voluntad y la inteligencia.