Mariano Rajoy acepta la invitación del presidente José Luis Rodríguez Zapatero para integrarse en la misión oficial que asistirá a los funerales del papa Juan Pablo II.
Los Reyes presidirán la delegación oficial en las exequias del pontífice, que prometen ser los mayores fastos conocidos en la iglesia, famosa por su manejo del ceremonial.
Es la primera vez en la historia de la democracia que presidente y líder de oposición representarán juntos a España en un acontecimiento de esta índole.
El ofrecimiento de Zapatero se mantiene pese a las críticas del Partido Popular al gobierno por decretar un solo día de luto en un estado constitucionalmente aconfesional.
El talante de Zapatero ha encontrado aceptación en Rajoy. ¿Habrá de nuevo voces discordantes en el PP que desdigan al líder?
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