José Bono es así. Posiblemente no ha habido ministro de los ejércitos igual desde Manuel Azaña. A su lado Juan de Austria y el Marqués de la Ensenada comienzan a palidecer.
Ahora ha recuperado con ese orgullo español que le caracteriza la denominación de Día de la Fiesta Nacional para lo que otros han llamado tímidamente la Hispanidad.
No te pierdas el anuncio de esta fiesta militarizada en cinco idiomas estilo Band of Brothers y el programa (pdf) de festejos.
¿No podían apear ya al ejército de las celebraciones nacionales? ¿No deberían ser más cívicas y menos nacionalistas y añorantes de viejos estandartes caídos, o casi?
Luego sale la Legión a parar la avalancha de inmigrantes en Ceuta y Melilla y hace el ridículo espantoso.