El triunfo de España en el Mundial de Baloncesto de Japón fue visto por 3,6 millones de espectadores, una cuota de pantalla del 47,6%.
El equipo de oro no reventó las audiencias, aunque la hora no ayudó. Fue el octavo partido de baloncesto más visto desde 1992, pero el primero en cuota.
El Gran Premio de Fórmula 1 de Turquía, de 27 de agosto pasado, fue visto por 4,36 millones de espectadores, una cuota del 42%.
Más de doce millones de personas vieron perder a la selección de fútbol ante Alemania. Más de diez millones vieron al Barça en la final de la Liga de Campeones.