David Madí, gurú electoral de CiU, defiende la campaña total de vídeos, notarios y gestos que llevó al partido de Artur Mas a la victoria pero lo incapacitó para gobernar con otros en Cataluña.
Politizarlo todo para llegar al poder. Totalitarismo electoral.
Madí se divierte, justifica la opción de todo o nada y cómo se aprovechan los políticos de la irrefrenable pasión periodística por un objeto que alimente el griterío.
-Sí. ¿De veras cree que su campaña ha creado estilo?
-Lo creo. Y si lo creo es porque siempre tuvimos presente que debíamos enfrentarnos a la claridad. Y la claridad significaba explicar a la ciudadanía que aquí solo había dos alternativas. Una era el tripartito, que estaba muy decidido. Y la otra éramos nosotros. Supongo que usted no me negará que el ya famoso documental, el DVD, es inatacable.
-¿Como producto propagandístico?
-Como todo. Su tesis era premonitoria. Se decía de él que generaría una cierta movilización en los partidos adversarios. Fundamentalmente en el PSC. Y no ha sido así. También se ha demostrado rotundamente falso que el DVD dificultara las relaciones, el diálogo con los otros partidos. El tripartito era un plato precocinado.
-Usted, como buen comunicador, sabe que las personas solemos desconectar a los diez minutos. Su DVD duraba...
-Lo necesario.
-Sospecho que al final del DVD solo llegaron aquellos que ya estaban convencidos.
-Es difícil demostrar lo que usted apunta. En cualquier caso fue un éxito de distribución, de expectativas. Fue un éxito en internet. Perdone, pero nuestro DVD fue un éxito.
-Gracias a los periodistas.
-Éramos muy conscientes de la polémica que generaría. Sabíamos que solo la polémica ayudaría a su distribución.
-Y los periodistas, siempre dóciles, picamos.
-Esto lo dice usted. Lo que yo digo es que el mejor aliado de la difusión del DVD era la polémica.