Thursday, April 08, 2010

Ni HD, ni interactividad

Los contenidos siguen siendo los reyes de la televisión. Cuando ya toda la televisión es digital, el interés de los espectadores por las nuevas posibilidades como la alta definición o los servicios interactivos es muy limitado. Las cadenas no quieren renunciar a canales de su múltiplex para concentrarlos en la alta definición. Y tampoco aumentar sus posibilidades interactivas como emisión en versión original, visión multicámara, servicios de texto o de programación. Pero nadie presiona, ni el gobierno ni la audiencia. La gran promesa de la TDT son más canales, más contenidos para elegir. Por eso las compras de última hora antes del apagón analógico se han concentrado en descodificadores sin servicios interactivos.

Los deportes y el cine son los reyes de la nueva televisión. El fútbol y la Fórmula 1 fueron los grandes motores de la nueva televisión el mes pasado y acumulan las mayores audiencias junto a las series de mayor éxito, como Águila roja (TVE) o Los protegidos (A3). Y en las temáticas, los niños son los grandes consumidores de canales como Clan TVE y Disney.

Una encuesta oficial en Gran Bretaña revela el mismo escaso interés de los televidentes por las posibilidades tecnológicas de la televisión digital. Sólo un tercio de los abonados a televisión de pago con alta definición no renunciarían a la mayor calidad de sus programas. Incluso más de la mitad de los suscriptores estarían dispuestos a pagar más de 23 euros al mes por ese servicio. La interactividad sale peor parada. Sólo un 11% de quienes la disfrutan la consideran indispensable.

¿Cuál es entonces el futuro de la televisión digital? Más contenidos, mayor posibilidad de elección. Una parrilla más personal, menos atada a los horarios de los programadores. Los telespectadores continúan reclamando más contenidos de calidad y más posibilidades de disfrutarlos cuando se quiera. Pero la TDT –a diferencia de otras plataformas digitales como la televisión por internet- no permite la emisión de contenidos a demanda y los PVR, los grabadores digitales que permiten ver contenidos a cualquier hora y sin publicidad, son aún minoritarios. Una de las razones por las que muchos televidentes continúan prefiriendo las descargas como mejor alternativa para ver sus programas preferidos y para desesperación de las cadenas.

Columna en los medios de Vocento