Tenemos el móvil y la banda ancha de acceso a internet más caras de Europa. La Comisión Europea revela lo que todo el mundo sabe y el Gobierno niega. Pagamos la sociedad de la información a precio de oro y las políticas del Ministerio de Industria fracasan una tras otra porque se preocupa más de la televisión y de no molestar al ex monopolio Telefónica que de los intereses de los ciudadanos.
Es la enésima vez que organismos internacionales como la Comisión y la OCDE denuncian el retraso en la banda ancha en España, dos puntos y medio de penetración por debajo de Europa. Ni caso. El Ministerio de Miguel Sebastián ni siquiera es capaz de definir una postura sobre el servicio universal de telefonía, como denunciamos recientemente junto a más de 250.000 españoles que han firmado una petición para conseguir un ADSL más barato. Silencio administrativo.
Pagamos la sociedad de la información más cara de Europa. La oferta mensual más barata de móvil es de 35,89 euros, casi el doble que la media europea: 19,49. Pagamos un 20% más por la banda ancha para acceder a internet: 45,83 euros mensuales de media frente a 36,89 a pesar de la renta inferior frente a los países más desarrollados.
Sólo en internet móvil superamos a los demás con un 25,9% de penetración frente a un 13% europeo. Prueba de que cuando hay competencia real los ciudadanos lo aprovechan.
Pero Industria y las comisiones nacionales del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) y la Competencia (CNC) rehúyen que "hay un problema de competencia, y en términos de competencia tendremos algunas conversaciones con España", según declara la comisaria Viviane Reding.
El informe europeo desautoriza la política del Ministerio sobre la sociedad de la información y recalca que nuestros indicadores están por debajo de las medias europeas y que los ciudadanos no disfrutarán del dividendo digital consecuencia del apagón analógico, porque será usado por la televisión en contra de nuevos servicios de la economía del futuro. ¿Hasta cuándo?
Mi columna de mañana en los medios de Colpisa (Vocento)
La CMT se defiende en su blog con su repetida disputa metodológica con la Comisión Europea, pero donde vamos discutiendo la realidad de los datos en los comentarios