Índice de satisfacción con la política catalana (Marzo 2009, Generalitat de Catalunya)
El Parlament de Catalunya se extiende por las redes sociales. La cámara ya no sólo está en su sede y en su web. Ahora parte de su actividad está en YouTube, en redes sociales y a través de agregadores y herramientas de suscripción desde otras webs. El Parlament abraza dos principios fundamentales de internet: la distribución en red y las herramientas de participación. ¿Animará esta iniciativa de e-democracia al 86% de los catalanes insatisfechos con la política (pdf)?
"La e-democracia es sobre todo democracia y no sólo tecnología", afirma el Consejo de Europa. Los expertos exhortan a los políticos a "crear nuevas oportunidades para las iniciativas cívicas" y recalcan que el mejor estímulo es que los ciudadanos perciban que se hace caso a sus ideas e iniciativas.
¿Sufriríamos tantos alcaldes y cargos públicos investigados o condenador por corrupción si los ciudadanos disfrutasen de mejor acceso a la información y actos de los poderes públicos? Falta transparencia y una ley de acceso a la información que permita el uso eficiente de medios electrónicos. El Consejo de Europa recomienda achicar la brecha digital, promover las herramientas participativas y el uso de sistemas de voto inteligente para que los políticos expliquen claramente sus propuestas y reciban sugerencias. Herramientas como las usadas por el presidente Obama en su campaña y hoy incorporadas a varias webs oficiales.
El 13% de los británicos ya usa internet para la participación política, pero la brecha digital se abre entre los de mejor posición social y económica, y el resto. La falta de confianza y la escasa respuesta de los políticos son otras dos amenazas. Como en España, donde cada vez más ciudadanos usan la administración electrónica pero sólo una pequeña parte aumentan su participación política directa con internet.
Casi la mitad de los diputados del Parlament tienen blog frente a un 15% de miembros del Congreso. Pero más de la mitad de los catalanes se declaran desvinculados e insatisfechos de la política. Una brecha democrática digital y real. ¿Animará el ciberparlamento la participación y los ciudadanos influirán más en la legislación? La diputada Lourdes Muñoz Santamaría cree que "más canales de información permiten más control y seguimiento por parte de la ciudadanía, esto deriva en más exigencia y responsabilidad" para los políticos.
Es hora de demostrarlo: los poderes públicos gastan muchos recursos en difundir la actividad política, pero muy pocos en estimular y aprovechar la participación ciudadana.
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