Monday, March 23, 2009

Los medios quieren su parte de Google News

Los medios informativos quieren morder el pastel de Google News. Cada día se preguntan qué han hecho peor que las televisiones con YouTube o los libros con Google Books para no recibir ingresos del buscador por sus contenidos. Unos piden mejor valoración de sus noticias en los resultados y otros demandan parte de la facturación del buscador.
Google News y los diarios (a los que se unen el resto de medios noticiosos) siempre han tenido una relación de amor/odio. Unos creen que es parasitaria y otros la consideran una simbiosis, una asociación beneficiosa. De las dos cosas hay. Google News no podría existir sin los medios, que aprovechan el caudal de usuarios y vistas que les proporciona el buscador de noticias, aunque poco relevante en España, donde otros agregadores sociales como Menéame o los locales como Chuza tienen muchas veces mayor incidencia en el aumento del tráfico de las noticias.
En plena gran crisis de la prensa, los grandes medios norteamericanos que forman parte de su consejo asesor vuelven a reclamar a Google un mejor posicionamiento de sus informaciones en los resultados de búsqueda. Y demandan una parte de su enorme tarta publicitaria, tanto la que pueda llegar de su portal de noticias como del porcentaje que reciben de los contextuales.
La incorporación de publicidad al buscador de noticias y el acuerdo firmado con algunas grandes agencias europeas, entre ellas Efe, para incorporar sus contenidos originales vuelve a levantar a los diarios contra el buscador y revive viejas demandas de los principales suministradores de contenido periodístico.
Los diarios siempre han desconfiado de Google. Tanto por su posición hegemónica en internet y en la publicidad contextual como por su aprovechamiento de la economía del enlace, desconocida durante mucho tiempo para la mayoría de los diarios. El recelo contra Google News – en España desde 2003- siempre ha sido mayor porque muchos lo consideran una competencia directa a pesar de que sólo incluye titulares con enlaces, un par de líneas de texto de las noticias destacadas y pequeñas fotos.
Pero su algoritmo siempre ha estado en discusión y los diarios han reclamado con persistencia una mejor valoración de las exclusivas y las informaciones originales. Google lo ha prometido reiteradamente, pero nunca ha cambiado el algoritmo para lo que muchos consideran una mejora y otros ven como un intento de limitar el acceso y la repercusión de algunos medios.
Entretanto, los diarios se devanan los sesos buscando las formulas de SEO (optimización de búsquedas) para mejorar sus resultados en el buscador.
Los grandes medios norteamericanos están convencidos de que Google News ha sido uno de los máximos responsables de la pérdida de valor de la información y su conversión en un commodity, una materia prima reutilizable por muchos. En Google News, igual que en el buscador general de Google –que sigue teniendo mayor influencia en el aumento del tráfico que el especializado en noticias- conviven los medios con información propia con los que viven de las agencias o de la información ajena. Muchas veces sin aportar mayor valor.
Gracias a Google y al resto de buscadores ha aumentado el acceso a las noticias, pero también ha decrecido el tiempo que se dedica a cada cabecera. Además han puesto al mismo nivel a los medios que invierten sus recursos en información propia, cara y difícil de producir, frente a los agregadores y otros medios que reutilizan información ajena.
Ese funcionamiento ha erosionado el valor y la credibilidad de las cabeceras, además de mal acostumbrar a muchos internautas a que el último en publicar una información o el que sólo reutiliza material ajeno tiene tanto valor como el primero y exclusivo.
La apuesta del buscador por la actualización ha resultado nefasta para las exclusivas, por eso Google News prometió en 2007 crear un nuevo sistema para agrupar las nuevas versiones de una información bajo la fuente original. Una nueva programación que ha mejorado algo la calidad de la indexación y los resultados.

Muchos medios se preguntan ahora qué pasará cuando las agencias pertenecientes a la European Pressphot Agency (EPA) comiencen a proveer de contenidos a Google News. "Este nuevo enfoque no sólo mejor la experiencia para los usuarios, sino que da el adecuado reconocimiento a los periodistas y los medios que trabajan duro para descubrir las noticias", ha afirmado Josh Cohen, responsable de producto de Google News, reconociendo las viejas demandas de los medios.

¿Y por qué no pagar a quienes le suministran contenidos? Ahora que es imprescindible para los medios informativos encontrar nuevas fuentes de negocio, algunos creen que es hora de cobrar a los buscadores e incluso a los proveedores de internet. Es el origen de las demandas de la prensa belga y francesa contra Google.

A la vieja pelea se une ahora la publicidad. Google ha mantenido durante años una beta cómoda que le alejaba de las presiones publicitarias. Pero la necesidad de rentabilización de sus productos también achucha al Ciberleviatán y deja de mantener servicios sin resultados económicos. Y si Google paga por los libros o los vídeos, ¿por qué no debería hacerlo por las noticias?
La presión de los editores aumenta.

Artículo para Soitu.es