Mario Vargas Llosa: "El periodismo es el mayor garante de la libertad". Al menos lo era. Ahora más allá del periodismo profesional están los ciudadanos. El discurso informativo y el debate ciudadano se desplaza y se hace directo gracias a los medios sociales.
El periodismo debe seguir siendo "la mejor herramienta de la que una sociedad dispone para saber qué es lo que funciona mal, para promover la causa de la justicia y para mejorar la democracia", pero la codicia económica y las ataduras políticas a menudo lo estropean.
Pero conviene no dejar de ver los árboles en el bosque. Pervive y se hace todos los días muchísimo gran periodismo profesional y muchos entregan su vida y sus ilusiones para cumplir esa misión.
"Se puede medir la salud democrática de un país evaluando la diversidad de opiniones, la libertad de expresión y el espíritu crítico de sus diversos medios de comunicación", dice el escritor. Y se queda corto. Ahora esas mismas características se pueden medir en la conversación directa entre los ciudadanos.
Los blogs, los medios sociales y personales deben avanzar en interiorizar la visión crítica y perfectiva de la realidad y no caer en los errores de los viejos medios.