Míralos. Están sentaditos en una viga especialmente colocada para ellos a unos centímetros sobre las obras del AVE (deseado e inacabable) en Barcelona.
¡Que no se vean los pies, que no se vean! Que entonces no cuela.
Los candidatos se reúnen y falsean, inspirados por La Vanguardia, diario de poder, la famosa foto de Charles C. Ebbets Lunch Atop a Skyscraper (1932). Después, todos al Barça (menos Piqué).
Entre aquellos trabajadores y los políticos candidatos a la Generalitat no hay el mínimo parecido. Del riesgo y el coraje, ni hablemos.
Pero los políticos viven de la imagen y de la política, aunque sean impostadas.
Lo curioso es que los medios -los otros, los que no son dueños de la foto- piquen y publiquen el espectáculo aumentando su trampa y la promoción de un competidor.