La Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) anuncia una querella contra Javier Marías y el diario El País "por información falsa y un presunto delito de injurias".
Ni una sola crítica. La AVT da un paso más en la "anomalía" democrática denunciada por el escritor. La AVT no permite la discusión ni la opinión crítica sobre sus acciones y estrategia. Sorprende cada día más la confusión entre la condición de víctima del terrorismo y la persecución de objetivos políticos no legitimados por la tragedia y el dolor.
Como dice Marías: "A las víctimas de ETA hay que compadecerlas, alentarlas, ayudarlas, procurar que reciban justicia y resarcirlas en la medida de lo posible, porque han pagado y sufrido en nombre de todos. Pero ser víctima no da la razón, ni hace más sabio, ni convierte a nadie en santo, ni lo exime de su obligación de respeto hacia los demás ciudadanos".
La AVT se queja: "Javier Marías mezcla la actitud cívica que siempre ha tenido y tiene la AVT con la de otras personas que nada tienen que ver con nuestra asociación".
En sus manifestaciones de los últimos meses se ha visto a demasiados integrantes de grupos ultraderechistas. La convergencia y unidad de acción entre la asociación presidida por Francisco José Alcaraz y grupos como los Peones Negros también sorprende a muchos.
La crítica es legítima y nadie tiene el privilegio de estar al margen de ella en la vida pública. De la condición de víctima no duda ni Marías. De la política y estrategia de la AVT todos los ciudadanos tienen derecho a opinar.
Escolar | "Demagogo e injusto"