Arrancan las Crónicas del Editor Ejecutivo en Público. O sea, los reportajes interpretativos de Ernesto Ekaizer.
El nombre se hace extraño. Eso de editor ejecutivo suena fatal en España, donde esa figura del periodismo norteamericano no existe más que en Público.
¿Llegará a convertirse en género o quedará en anécdota?
Y Ekaizer arranca con una crónica sobre el futuro del nuevo gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero centrada en las tribulaciones y futuros de José Antonio Alonso.
La situación y posibilidades del ministro bien podría ser un trasunto de la del propio periodista.
¿Qué es un editor ejectivo?
El director, editor in chief del periodismo norteamericano. Pero el director de Público es Ignacio Escolar. Y, por tanto, quien tiene la responsabilidad legal y profesional.
Dice Ekaizer en su crónica que "José Antonio Alonso se ha convertido de facto en el pivote sobre el que aparentemente se desarrollaría la jugada".
Podría estar hablando sobre él mismo y los pensamientos del editor de Público, Jaume Roures, cuando apuntó a Ekaizer para ser la cabeza de un grupo con el nuevo diario en Madrid y El Periódico de Catalunya en Barcelona.
Como editor ejecutivo tendría la máxima responsabilidad sobre los dos diarios, por encima de sus directores, sólo por delegación de poderes del editor y propietario. Ahí es donde la terminología encuentra su sentido.
Pero si Roures no consigue comprar Zeta, sólo o con un acuerdo con Alfonso Gallardo, José Manuel Lara o RBA, las crónicas del editor ejecutivo pueden ser el cometido esencial de Ekaizer.
Público es un diario diferente. Está claro. Su director ganó fama como bloguero antes que como periodista (algo que puede pasar a muchos profesionales en el futuro); en la dirección general sienta a un periodista y no a un gestor, Juan Pedro Valentín; el principal creador del proyecto es el diseñador Toni Cases, accionista y con puesto en el consejo editorial, y ahora incorpora la nueva figura del editor ejecutivo, en su día reservada al fallecido Quim Regás.
Acaba el editor ejecutivo su crónica indicando que "se necesita un Gabinete sólido y profesional que funcione cohesionado en torno a un plan de acción y de objetivos".
¿Será un mensaje para Roures?
Y acaba la página de Público con un ¿Comparte la opinión del autor?, apelación que indica que los editores del diario se adscriben a la escuela periodística que olvida la tradición de la crónica en España y la subsumen en los géneros de opinión. Si es una crónica, el autor no debería de opinar, sólo analizar sobre hechos, datos e información.
Veremos en próximas entregas del editor ejecutivo...