La primera cara de la derrota de la noche es la de Pío García Escudero, responsable de campaña del PP.
Todos los sondeos anuncian una derrota mayor del PP frente a la 2004. El PSOE roza en algunos la mayoría absoluta y aumenta su ventaja sobre los populares.
Se confirma el avance de los partidos.
Frente a un Pepe Blanco tranquilo y confiado, la cara de García Escudero era la de la desesperación.
Si la derrota del PP se confirma habrá llegado el momento de la catarsis aplazada de la derecha española, sobre todo si aumenta la ventaja del PSOE.
Esperanza Aguirre espera, pero seguramente la pelea dentro del partido de la derecha sea cruda.
Es la hora de quienes estos cuatro años han estado en contra de una política de la crispación que sólo contenta a los seguidores más fervientes.