Periodismo, medios e ideas | Journalism, media and ideas | Una mirada a los medios, los periodistas y las ideas de la sociedad de la información | A glimpse at the media, journalists and ideas in the information society
Friday, April 22, 2011
Reiniciar la política de la cibersociedad
Columna completa en Estrella Digital
Red sin barreras en Europa
La comisaria para la Agenda Digital, Neelie Kroes, cierra la consulta europea sobre una red neutral y abierta reafirmando la competencia, transparencia, calidad del servicio y la posibilidad de cambiar de proveedor de banda ancha fija o móvil en un día.
Los reguladores vigilarán la neutralidad de la red y evitarán posibles bloqueos de servicios o contenidos.
Nadie puede restringir la innovación digital para defender su negocio, aunque se permitirán ofertas de pago premium de mayor calidad y velocidad para asegurar la inversión en nuevas redes. Lo que mantiene algunas sospechas de una internet de dos velocidades.
La comisaria advierte que está dispuesta a prohibir cualquier restricción o bloqueo. Una defensa de los principios abiertos de internet que obligará al Ministerio de Industria a dar marcha atrás en su defensa de una internet de peaje propuesta por Telefónica y defendida por Vodafone y otros operadores.
Otra derrota de la errática política de la sociedad de la información seguida en España por un gobierno despistado y una mayoría de partidos políticos sin imaginación ni compromisos con el futuro digital.
La Unión Europea dirime el debate abierto sobre la neutralidad de la red con una definición clara: los ciudadanos pueden “acceder y distribuir la información o utilizar las aplicaciones y los servicios de su elección” sin restricciones por las operadoras, tanto en redes móviles como fijas. Una defensa de los derechos fundamentales en la red donde cabemos todos.
Columna en los medios de Vocento
Tuesday, April 19, 2011
Redacciones abiertas con participación de calidad
Es el resumen simple de la experiencia que acumulan los medios sociales. El anonimato pierde valor cuando las redes sociales vuelven a destacar a los usuarios, sus contenidos y la red (relaciones) en las que actúan. Lo importante no es la identidad real, sino la identidad de dominio público, la creada para mostrar y compartir en las redes, para poner en relación la gente con la que nos relacionamos con los contenidos que nos interesan. Y para hacernos presentes en el debate público.
El periodismo abierto y social debe aprender a explotar esas identidades, sus necesidades de contenidos y sus posibilidades de relación, con el propio medio, sus periodistas y el resto del público, para hacerse más atractivo y necesario.
Vuelvo a estas reflexiones tras analizar las actitudes para una redacción social destacadas por Toni Piqué en Media140.
Esos puntos coinciden con muchas propuestas explicadas en Ideas para la participación de calidad o en Los medios como plataformas sociales, que recojo a continuación.
Lo mismo hemos hecho en La Voz del Interior (Córdoba, Argentina) y en otros medios.
Esas ideas del desarrollo de perfiles permiten crear una comunidad con participación de mayor calidad y responsabilidad, además de promover la relación entre usuarios.
Ese mayor control social y autoresponsabilidad es el que buscan otros medios como El Mundo, que también ha incluido los perfiles de usuarios hace poco, o el desarrollo social de Eskup en El País, heredero de la experiencia de Soitu.es.
Para aprovechar esas ideas y herramientas, los periodistas y los medios deben tener una actitud abierta, tanto en el proceso de la información como en la relación con el público.
El proceso de la información no empieza con la publicación, sino con el reporteo y el contacto con las fuentes. En la medida que el reporteo y la edición de la información se comparten, internamente (periodista, fuentes, redacción) y externamente (algoritmos y herramientas de reporteo digital, comunidades interesadas, público general) se enriquece la información, se crean más oportunidades de participación creativa y de compromiso (engagement) entre periodistas, medios y audiencia.
Tenemos las herramientas para desarrollar el criterio social y para convertir al periodista y los medios en redes sociales. Para construir redes entre periodistas y público.
Con el desarrollo de las redes sociales y la inclusión del criterio social en las búsquedas, como en Google con el social rank y su botón +1, el flujo social se convierte en la clave de la distribución social de la información.
Aprovechar ese flujo social interna y externamente en los medios es una de las claves para su optimización social. La incorporación de las redes sociales a los perfiles internos y el desarrollo de sistemas de suscripción y participación como el Follow de Mashable, aumentan la viralidad de los contenidos y actividad de los usuarios aprovechando el despliegue de su identidad y relaciones.
Un camino donde todavía tenemos mucho por transitar.
Monday, April 18, 2011
El fin del gratis total
El fin del todo gratis amenaza cuando internet no es ya un medio joven y libertario, sino el lugar donde los contenidos y servicios se encuentran con la mayoría de sus clientes. El mayor mercado de contenidos y servicios jamás construido.
El todo gratis acaba, pero internet seguirá ofreciendo la mejor y más barata plataforma conocida para los productos innovadores, disruptivos, gratuitos, los que obligan al negocio tradicional a espabilar para no perder clientes o a rendirse a los más eficientes, baratos y con más satisfacción para el usuario.
Columna completa en Estrella Digital
Thursday, April 14, 2011
Un mando para controlar la publicidad
Columna completa en Estrella Digital
Wednesday, April 13, 2011
Internet supera la publicidad de diarios y cable en EE UU
Sólo la suma de todas las cadenas nacionales y locales de televisión en abierto rebasa a internet como primer soporte publicitario.
Las cifras de 2010 también sancionan el cambio en el modelo de precios. El 62% de la publicidad se contrató por resultados frente a un 33% de CPM y un 5% híbrido. Prácticamente a la inversa que en España, donde el CPM aún es el 60% de mercado y la tarificación por resultados supera el 23% incluyendo el CPC.
El estudio del Internet Advertising Bureau (IAB) no especifica el reparto del mercado, pero según otros analistas como eMarketer, Google mantendría un 38,9% del negocio cuando las búsquedas concentran el 46% de la publicidad frente aun 24% de gráfica (sube dos puntos), un 10% de clasificados y un 11% de vídeo y rich media.
Los diarios consiguen sólo 3.000 millones de dólares (2.073 mill. de euros) de la publicidad digital, un 11,5% del total, según los cálculos de eMarketer. Una cifra bastante similar a la cuota total de los diarios en España, aunque con un peso mucho menor de internet en el mercado publicitario total.
Los grandes diarios concentran el negocio digital
La publicidad digital todavía está muy concentrada y se inclina por los medios nacionales, como demuestran las cifras de 2010.
Una comparación con Gran Bretaña muestra la brecha entre la facturación digital de los grandes medios nacionales y los locales.
En España, Unidad Editorial (El Mundo, Marca, Expansión, etc.) alcanzó el 16% de sus ingresos publicitarios en internet en 2010, unos 36 millones de euros.
Prisa no ofrece datos de su facturación digital, pero en el sector se calcula -sin confirmación oficial- que los ingresos de las ediciones digitales de sus diarios (El País, As, Cinco Días) estarían por debajo de Unidad Editorial, alrededor de los 25 millones de euros, cerca del 15% de la facturación publicitaria.
En Vocento, el principal grupo de prensa regional y con fuerte apuesta por la convergencia y los nuevos negocios, las ediciones digitales y los clasificados on line representaron el 13,5% de la facturación publicitaria de sus cabeceras y un 11,2% de la publicidad de todo el grupo.
Pero en el resto de los grupos y cabeceras regionales y locales, los ingresos suelen ser mucho menores. En muchos de los casos, alrededor del 5 al 6% de la facturación publicitaria.
Comparados con los medios británicos, uno de los mercados digitales más fuertes, la brecha entre medios nacionales y locales se mantiene.
Según cifras de Paid Content, dos grandes diarios británicos, Financial Times y The Guardian, superan de largo los ingresos de la prensa digital española, mientras el resto estaría más cercano a su estructura de ingresos.
Destaca la fortaleza de Financial Times, que gracias a sus ingresos de pago consigue superar el 36% de su facturación de los medios digitales.
The Guardian consigue casi el 17% de su facturación total de internet y los móviles (donde su aplicación es de pago).
Otros grupos como Trinity Mirror o News International (The Times, The Sun, News of the World) están entre el 8 y 10% de sus ingresos del negocio digital.
Por debajo quedan los principales grupos de prensa local y regional, además del resto de diarios.
La comparación con los principales grupos estadounidenses es peor para toda la prensa. The New York Times conisguió el 16% de sus ingresos en 2010 de los negocios digitales. La cuota digital se elevó hasta el 26,3% de su facturación publicitaria.
En el caso de los grandes grupos de diarios locales, la diferencia con España es mucho mayor. Tanto en el caso de Gannett como en el de McClatchy, la facturación por publicidad digital se eleva hasta algo más del 18% del total, muy por encima de los medios españoles.
El retraso en la apuesta por internet, la falta de desarrollo de nuevos negocios y productos, están lastrando el futuro de una prensa local que en otros lugares se mueve mucho más rápido. Con la convicción de que mientras se mantiene el negocio tradicional hay que desarrollar con decisión las nuevas oportunidades. O pasarán antes de poder abordar sus desafíos y tanto la audiencia como el negocio serán de otros.
Tuesday, April 12, 2011
Televisión social
Incluso nacen cadenas como Divinity (Telecinco) después de lanzarse en la web: un ejemplo de convergencia inversa.
En The Future of Advertising lo hemos estado debatiendo esta mañana. Anunciantes y centrales de medios aún son conservadores. Las grandes cadenas, también. No en vano se están recuperando de la crisis. Una recuperación acelerada gracias al fin de la publicidad de RTVE.
La televisión está en todas las pantallas. La convencional y lineal comienza a ser poderosa en internet y la convergencia acelera tiempos, negocio, nuevos mercados y oportunidades.
Muchos programas tienen ya en internet mucha más audiencia que en los canales temáticos de la TDT. Pero el dinero, los anunciantes y muchas agencias aún son conservadores y quieren sostener el viejo mercado. Un conservadurismo acentuado por las heridas de la crisis y las incógnitas de los nuevos medios.
Esta mañana volvía a palparse el enorme enojo y confusión con las mediciones. A la espera del medidor único, los anunciantes reclaman claridad e información fiable.
Uno de los grandes déficits del mercado de internet. En todo el mundo por la complejidad de las herramientas analíticas y de los datos, y en España por unas guerras de cifras que no benefician a nadie y extienden la sospecha.
A falta de certezas, tenemos pistas, trending topics, les he llamado hoy para representar la emergencia de una televisión social, compartida, televisión 2.0, etiquetada. Una audiencia en crecimiento que dará un nuevo salto con la popularización de los televisores conectados, bien directamente o a través de las consolas de videojuegos, pero también de la extensión de las tabletas.
La diferencia de inversión publicitaria es muy grande, pero comienza a achicarse con la audiovisualización y crecimiento de internet, la fragmentación del mercado y la búsqueda de mayor eficiencia y rentabilización. En busca del cliente y su entorno social.
El dispositivo es cada vez más personal, pero la experiencia de la televisión sigue siendo, como siempre, social. Ahora más que nunca gracias a la comunicación en tiempo real y el flujo social en las redes.
Preguntas y pistas para el futuro de la TV.
Facebook censura ¡Democracia Real Ya!
Son un puñado de ciudadanos y asociaciones que reclaman otra política. En ¡Democracia real ya! quieren vivir la democracia en tiempo real, como permiten los nuevos espacios de comunicación. Difunden un manifiesto y convocan manifestaciones en varias ciudades. Nada ilegal si esas manifestaciones se autorizan. Pero Facebook sentencia y censura sus convocatorias en esta red social. Sin respetar la democracia ni la libertad de expresión. Sin juicio, sin pedir información, sin avisar.
Es una nueva muestra del control 2.0 de las grandes empresas de internet sobre los nuevos espacios sociales. Como ya ocurrió en anteriores ocasiones, de Wikileaks a la protesta gay contra la visita del Papa.
Otra vez la paradoja del control 2.0: cuando internet y las redes sociales se han convertido en el nuevo espacio público de la democracia, los datos y la actividad de los usuarios están cada vez más privatizados en manos de grandes empresas.
Sin control ciudadano. Desde un despacho de Facebook, Twitter o Google se puede censurar sin ningún tipo de garantía democrática para los clientes y usuarios de esos servicios.
Los responsables de Democracia real ya se han puesto en contacto con Facebook en España para solucionarlo. Pero hace ya muchos años que en este país no existe la censura. Mucha gente ha luchado años contra ella y para garantizar las libertades como para que ahora las empresas de la red social se permitan acabar con los derechos fundamentales de los ciudadanos.
No vale ninguna excusa. La gratuidad de sus servicios no justifica ningún abuso. El usuario tiene derechos inalienables más allá de ningún contrato de servicios. Pero son grandes empresas que demuestran escasa cultura 2.0 a pesar de tanto marketing social.
Esta nueva censura vuelve a mostrar los peligros de la privatización del espacio público y la necesidad de controles legales y democráticos sobre las prácticas de estas empresas.
El neofeudalismo de los abusos corporativos vuelve a demostrar que la concentración de las herramientas y espacios virtuales en unas pocas manos es un peligro para las libertades y la democracia que también ayudan a espolear.
Y reafirma la necesidad de redes libres y de control ciudadano efectivo sobre empresas que controlan nuestros datos, nuestros contenidos y una parte importante de nuestra actividad personal, política y cívica.
En estas protestas ciudadanas contra la partitocracia bien se puede empezar a reclamar a las empresas de internet un respeto a sus usuarios que a menudo compañías como Facebook olvidan. Pero que recordarán si la protesta es lo suficientemente ruidosa, como está ocurriendo con #facebookcensura y #democraciarealya, las etiquetas de Twitter que condenan la violación de derechos por Facebook.
Monday, April 11, 2011
Democracia en tiempo real
Política instantánea desde el móvil y el ordenador. Los viejos poderes –partidos, políticos, medios de comunicación- han sufrido la semana pasada el control ciudadano desde los nuevos espacios públicos creados por las herramientas digitales. Ahora están obligados a estar atentos.
La partitocracia y los poderes oyen la voz ciudadana con tanta inmediatez y fuerza que resulta difícil no hacer caso. La política está en las redes, y con ella crece el poder de una pequeña élite digital con influencia en el resto de los usuarios.
Columna completa en Estrella Digital
Friday, April 08, 2011
Sr. Chinarro, contra el plástico
La primera vez que vi África lloré por la madre de la Tierra. Como Paul Theroux en su Dark Star Safari conté más bolsas que leones. Lo mismo ocurre en la Pampa cuando no está cosechada de soja, en el Sertón, en las altiplanicies andinas. Y especialmente en las fronteras entre ricos y pobres.
La mierda.
Don DeLillo lo cuenta en Submundo. Cómo vivimos entre la mierda y el plástico hasta hacerlo parte de nuestra cultura, de nuestra vida. Y, algunos, su riqueza. Los Soprano y The Wire viven de ese filón.
El Sr. Chinarro vuelve con un disco llamado Presidente. Vacaciones en los plásticos del mar. Un sexto continente. Antonio Luque tiene más pinta de un desastroso Pynchon que del aseado DeLillo. Como en Gravity Rainbow, navega entre plásticos y combina un poco de amor con letras pellizcantes y rebeldes, donde la fantasía pierde a ese tipo que busca a Oedipa Mass en ese sexto continente construido con la mierda que ya no sabemos donde meter. Un poco de música y poesía para seguir tragando.
Algo de música para este año, o un poco de jazz para rematar el viernes
Menos creíbles por falta de transparencia
El informe analiza cinco áreas: contenidos, producción editorial, publicidad, relación con los lectores y sistemas de control. Los autores reclaman libros de estilo y criterios claros sobre contenidos de riesgo, veracidad e independencia en la información, publicidad con criterios claros y responsables, más sistemas de relación con los lectores (faltan las nuevas herramientas de las redes sociales y la web) y cómo se vigila ese cumplimiento.
De entre El País, El Mundo, ABC, La Vanguardia, El Periódico, La Razón, Público y La Gaceta, sólo el primero tiene acceso y posición clara en su libro de estilo sobre asuntos como suicidios, violación o lenguaje.
Los autores, como los lectores, no encuentran compromisos explícitos de los diarios con los principales criterios deontológicos, aunque algunos los tienen en sus documentos, poco accesibles.
En la falta de publicidad responsable y límites a las presiones comerciales sobresale la publicación de anuncios de contactos por todos menos Público, La Razón y La Gaceta. En el gráfico, los últimos ingresos anuales conocidos por anuncios de prostitución:
El informe defiende la existencia de canales de rectificación claros, como los que ahora se pueden implementar en la web de forma sencilla. Sólo El País y La Vanguardia tienen la figura del defensor del lector.
Por último, el informe constata la falta de auditorías informativas y de calidad, así como el segumiento de un código ético, manifiesto y no sobreentendido, de cada publicación.
Aunque algunas conclusiones del estudio pueden ser objetables, la mayoría van en la buena dirección de implementar en los medios sistemas de transparencia, deontología, autocontrol y responsabilidad cada vez más necesarias cuando la presión del negocio o del tiempo real aprieta.
Más responsabilidad, con Sostres y sin él
Las palabras no son inocuas. Matan como las balas. Hieren como aquellas espadas como labios de Aleixandre. En una democracia con libertad de expresión no es el poder ni la justicia quien debe vigilar y asumir las consecuencias de la opinión, sino el propio público y los responsables de los medios.
En el cálculo de la responsabilidad y su asunción está la verdadera diferencia entre el periodista y los medios profesionales, y el resto.
El caso Sostres es lamentable no sólo por la polémica generada por un artículo comprensivo con la violencia machista, sino por la hipócrita irresponsabilidad de los responsables de su publicación y de una gran parte del público que lo defiende.
Lo comenta la ministra de Sanidad e Igualdad, Leire Pajín, en su blog: a muchos nos sorprendió hace unos días observar como el maltrato, la violencia y los asesinatos contra las mujeres son una preocupación menor para la sociedad. Del cero al 0,1% en las respuestas espontáneas del último barómetro del CIS.
Con 74 mujeres muertas en 2010 y 17 este año, con jueces remisos a imponer pulseras electrónicas a los maltratadores -la disyuntiva entre libertad y responsabilidad- y con cien mil mujeres con protección policial, el mal es enorme.
Una parte de la sociedad no puede volver la cara. Es responsabilidad de todos denunciar y condenar al maltratador y a quienes lo defienden.
Era buen chico, normal. La frase se repite en los testimonios de los vecinos en televisión entre los llantos por cada muerta sin que los editores de los telediarios se preocupen de su valor informativo, pertinencia y responsabilidad. Sostres la utilizó para titular su artículo.
Es la comprensión de la sociedad. El círculo vicioso de la banalización del mal que muchos comprenden y ante el que asienten, resignados como los confesos hipócritas en el reclinatorio.
Es la comprensión de Sostres hacia un chico malherido por la violencia del desamor. Es la falta de responsabilidad que victimiza al asesino, al maltratador, para extender la sospecha contra la víctima. La arpía escondida en las raíces más profundas de nuestra cultura milenaria.
Es la técnica más antigua de la propaganda.
Los testimonios cándidos de los vecinos y la comprensión de Sostres son el medidor de nuestra hipocresía.
Contra ella, responsabilidad.
Pedro J. Ramírez, asumió ayer una parte al retirar el artículo de la web. "Ayer fallaron nuestros controles. Vuelvo a pedir disculpas", dijo en Twitter.
Tarde e insuficiente. Se lo dijo su redacción, se lo han dicho muchas personas de El Mundo los últimos meses, se lo dice la competencia.
Pedro J. Ramírez sabe a qué juega con Sostres, como lo sabe este polemista.
A mí no me importa Sostres. Coincido con la ministra Pajín. A mí me importa la sociedad inconsciente del significado y las consecuencias de las palabras. Del jolgorio irresponsable, a menudo mentiroso y siempre maledicente e inquisitorio de tantas tertulias televisivas y radiofónicas, de tantos blogs y tuits que se creen ocurrentes cargando contra la políticamente correcto, contra tanta sociedad que sigue sin sentirse responsable y que se escandaliza ritualmente ante el lloro de los huérfanos. Entre los sollozos se sigue oyendo la sospecha contra la víctima.
La redacción de El Mundo le recuerda a su director que ya habían protestado el 17 de noviembre contra la irresponsabilidad y le piden que prescinda de su colaboración. "En contra de lo que sostiene Sostres, en la violencia machista no hay descontrol de la ira. Hay afán de dominación". La redacción del diario explica claramente el origen del cáncer machista.
Y su analogía con el terrorismo es pertinente: "Mientras en este país la apología del terrorismo siga siendo delito, entender un crimen, como afirma Sostres en su columna, debería estar perseguido por la ley".
Recuerdan que las vilezas y exabruptos de Sostres son constantes. Su irresponsabilidad y la de quienes lo amparan y publican, también.
Yo defiendo a Sostres y lo acuso.
Yo quiero que Sostres siga escribiendo para gritarle a la cara que es un cobarde.
Yo quiero que Telemadrid y Pedro J. continúen albergando sus opiniones para denunciar su vileza moral y la de quienes lo jalean.
Yo quiero que Sostres escriba y hable para que nos empuje a todos a perseguir con justicia, implacables, a quienes creen tener el poder de acabar con la vida de quienes creen suyos.
Yo quiero que Sostres escriba para poder seguir escribiendo en contra.
Yo quiero poder gritarle a quienes lo aplauden que son cómplices de esos asesinatos. Peor. Irresponsables, refugiados en la inocencia de quienes no dan la cara.
A mí no me importa Sostres. Me importa poder decirle a algunos que cuando lo comparan con el mal descrito en tantas obras, de Sade a Capote, de Bernard Hénry-Levine a Céline, de Martínez-Santos a Panero, todos, todos esos son responsables.
Unos escribieron para denunciar e intentar comprender las razones de la maldad. Otros para sacarla de las entrañas de lo humano y arrojarla ante los demás. Otros, simplemente, para confesar su fascinación y su responsabilidad.
El problema no es Sostres ni lo que piense. Ni la demora compasiva y comercial del director de El Mundo. El problema es no darnos cuenta de la raíz y los males de una sociedad que asiste horrorizada e impotente, pero trémula y compasiva, al desfile del horror cotidiano y su banalización en los medios y las opiniones.
Dejar la impunidad, aumentar la responsabilidad, es la obligación de una sociedad democrática y responsable. Para que dentro también puedan vivir nuestros monstruos. Y más que perseguirlos, los estudiemos para evitar que mañana vuelvan a ser, para evitar que mañana todos seamos impunes.
Seamos lo que queramos ser. Digamos lo que pensemos. Sin renunciar al dolor, la depravación, el vicio, la mentira y la violencia. Porque existen y son parte de lo nuestro. Pero seamos responsables. Ante nosotros y los demás.
El resto es hipocresía.
Thursday, April 07, 2011
Los grandes diarios nacionales pierden audiencia
Junto a ellos, la caída de los gratuitos, irremediablemente atados a la evolución de la economía.
Marca y As son los grandes acaparadores de audiencia estos últimos años. El primero gana más de medio millón de lectores y el segundo, 270.000.
El País y El Mundo, los que más pierden. El diario de Prisa se deja casi un cuarto de millón de lectores y el de Unidad Editorial más de 150.000.
Entre los generalistas, La Vanguardia es el gran ganador, con 86.000 lectores más.
Las pérdidas de los gratuitos oscilan entre el más de medio millón de Qué, los 320.000 de ADN y los 285.000 del líder 20 Minutos.
Los locales aguantan mejor, con la excepción de Diario Vasco y El Correo, con pérdidas superiores a los treinta mil lectores, y Levante, con 15.000 menos.
Una guía del miedo contra las descargas
Una guía plagada de inexactitudes, que olvida que ningún enlace es ilegal y que sólo los sitios de alojamiento de contenidos ilícitos o difundidos con comunicación pública pueden ser perseguidos.
Columna completa en Estrella Digital
Eurodiputados caraduras
Sólo cuatro eurodiputados españoles votaron en contra: Raül Romeva (ICV-Verds), Oriol Junqueras (ERC), Ramón Tremosa (CiU) y Rosa Estaràs (PP). Pero la crítica en Twitter y el poder de la protesta en las redes obligó a algunos políticos y partidos a dar explicaciones y reconsiderar su voto.
La democracia es más directa, participativa y responsable con las herramientas que abren nuevos espacios a la democracia y aumentan la responsabilidad pública.
Es interesante observar la reacción de los partidos y políticos en Twitter ante la avalancha de críticas para comprender la política y actitud de cada uno.
He recopilado un resumen de las reacciones.
Y al tiempo de cerrar este post, la protesta en Twitter también fuerza a elmundo.es a retirar un post de Salvador Sostres y a Pedro J. Ramírez a pedir disculpas públicamente.
Sostres sigue en la edición impresa porque al parecer nadie detectó en El Mundo lo grave de sus afirmaciones sobre la violencia contra las mujeres -una vez más-, reconoce el director del diario.
Anticampaña 2.0
Los políticos lanzan la campaña. Y no habrá forma de esquivarla. A los mítines, el buzoneo, los carteles y la cobertura en los medios, los partidos suman este año como nunca a internet y las redes sociales mientras censuran la información con la imposición de cuotas electorales en los telediarios, tanto en cadenas públicas como privadas. Pero cuanto más cerca están los candidatos de la gente, más crece la protesta contra una política virtual, con promesas olvidadas desde el poder.
El PSOE vuelve a probar la amarga cura de la democracia. Esta semana ha presentado su campaña 2.0 en las redes sociales con un nuevo agregador de candidatos y una página para hacerse voluntario. Pepe Blanco ante cámaras y periodistas proclamando que "el PSOE va a situar la campaña 2.0, la campaña virtual, por primera vez, al mismo nivel que la tradicional". En Twitter, la etiqueta #psoered –con las que se agrupan tuiteos- pasó en pocos minutos de ser una herramienta de propaganda a revolverse con la ira y las protestas contra el gobierno. Las etiquetas #paro, #leySinde, #promesasincumplidas o la irónica #graciaszp fueron la respuesta a una política y unas campañas que convencen sólo a los ya convencidos.
En Twitter ayer la protesta de muchos internautas contra los #eurodiputadoscaraduras contrarios a ajustar sus sueldos y privilegios y a volar en turista obligó a partidos como PSOE o UPyD a dar marcha atrás mientras otros como el PP continúan sordos.
Los socialistas prometen que escucharán a la gente con vídeos al estilo de Tengo una pregunta para usted, cibermítines o debates 2.0 en las redes sociales. Tendrán mucho que oír. La ciberpolítica no se controla imponiendo cuotas como a la televisión, ahogando voces con la apisonadora publicitaria ni aumentando el presupuesto para campañas, como se hará este año pese a la crisis y las reiteradas promesas de los partidos de frenar los gastos electorales.
Lo que ahorran los partidos con internet lo gastan en televisión, autobuses y fiestas para militantes y escenografía. Pero las herramientas no son la política. Los ciudadanos están hartos de sobreexposición y de políticos más preocupados por las elecciones y las internas partidarias que por gobernar. La propaganda puede ser virtual, pero la política necesita realidad y compromiso, también en las redes.
Columna en los medios de Vocento
Wednesday, April 06, 2011
Los grandes diarios mandan en Twitter
La distancia crece en ambos casos respecto al resto de medios, especialmente frente a la prensa local y regional, a mucha distancia y con el problema añadido de la concentración geográfica de la atención hacia una agenda nacional.
Las redes sociales siguen a los grandes medios, una refutación parcial del mito de la fragmentación. Las redes sociales aumentan el consumo de medios y fuentes para la información, pero los grandes medios siguen marcando la agenda de la mayoría de los usuarios.
Es una prueba más de la conclusión de que los grandes medios son los mayores proveedores de información en las redes sociales, difundida y distribuida por una minoría de usuarios a la mayoría del público. Se mantiene la vigencia de la teoría del doble flujo de comunicación de Paul Lazarsfeld y la influencia de los grandes medios redistribuidos por una élite de usuarios. No sólo llegan directamente a muchos, sino que sus mensajes son redistribuidos por los usuarios más activos y seguidos por otros.
El poder de agenda informativa continúa muy concentrado. Las redes han permitidido llegar a más fuentes y ampliar la atención a otros temas no instalados en la agenda por los grandes medios, pero la influencia y la autoridad continúan tendiendo a la concentración.
En el análisis es importante también la presencia activa de los propios medios. Mientras los medios con más influencia y seguidores han desarrollado una estrategia viral de presencia en las redes sociales muy importante, el resto está presente por lo general con una actividad mucho más baja.
Y lo mismo se puede observar cuando se analiza el seguimiento a los directores de medios, con una importante diferencia entre los directores de los grandes medios nacionales y el resto.
También en esta lista, se puede observar como una presencia más activa multiplica la influencia, como en el caso de la metralleta Pedro J. Ramírez, incorporado hace poco a Twitter pero con una actividad intensísima, próxima al bloqueo del timeline de sus seguidores.
Monday, April 04, 2011
De Zapatero TV a #nolesvotes
La comunicación se democratizaba. Los ciudadanos tomaban los medios al asalto en los albores de las redes sociales. La marca ZP conectaba al líder socialista con los votantes apoyada en la promesa del talante y un reframing de los medios y la información envuelto en las teorías de George Lakoff y las premisas del olvidado republicanismo cívico.
Zapatero se empeñó, asesorado por Miguel Barroso, su gurú mediático, en redibujar el mapa de los medios con más, mucha más televisión. Creación de cadenas amigas –La Sexta, Cuatro- para compensar el dominio de la derecha y una promesa realizada a Pedro J. Ramírez: “Cuando esté en pleno funcionamiento la TDT todos los periódicos importantes van a tener una televisión de referencia”.
Del boom audiovisual con la despolitización de RTVE a la nueva concentración, por el negocio y la insostenibilidad de más de un millar de cadenas, pero también por la crisis sufrida por los medios. Tan dura como la del ladrillo y con mayor impacto político.
Alfredo Pérez Rubalcaba y Carme Chacón ya están en el cajón de las primarias. Los medios también votan, a la espera de sorpresas y tapados. El vicepresidente es el candidato de Prisa y El País. Con Rubalcaba, el mago de la comunicación que se permite autopreguntarse para enmudecer a los reporteros, la vieja alianza entre el diario de referencia de la Transición y el PSOE puede recomponerse tras los encontronazos entre el mandarín Cebrián y un presidente novel pero decidido.
Carme Chacón también es la Sra. Barroso. Su marido fue el primer secretario de Estado de Comunicación y el gran planificador de la explosión audiovisual con la TDT y la primera reforma de RTVE, con Comité de Sabios para acabar con la deuda y el control político que había llegado a la pantomima de los telediarios de Urdaci.
¿Dónde está el presidente? Con Guardiola. Era la respuesta a las preguntas de los periodistas en un viaje a Argel en 2006. El entrenador del Barça rodaba un documental sobre Zapatero para Mediapro. Era el resultado de las mañas de Barroso, el hacedor de Zapatero TV, la gran expansión de la televisión en abierto con la creación de La Sexta y un grupo afín al nuevo gobierno. Un nuevo escenario donde Jaume Roures con Mediapro, José Miguel Contreras al frente de La Sexta y el apoyo de las productoras que marcaban estilo en la nueva televisión haría de Imagina uno de los grandes grupos audiovisuales.
El diario Público nacería impulsado por Roures y con oposición de sus socios televisivos para ser alternativa de izquierda a El País, crítico con ZP por la política y el negocio e inmerso en la crisis aún pendiente de Prisa.
Las próximas primarias del PSOE son también la continuación de esa lucha mediática. Del nacimiento de La Sexta y Cuatro para compensar el mando audiovisual de Telecinco y Antena 3 a la guerra del fútbol con la TDT de pago entre Mediapro y Prisa. Y una nueva concentración donde también están atrapados los diarios, como prometió el presidente, por la crisis y una multimedia embrionaria. Con pobres resultados de audiencia y cuentas algo aliviadas por la prohibida publicidad de RTVE.
Aznar también sucumbió al embrujo mediático y en 2004 se convertía en consultor y más tarde consejero de News Corporation, el grupo ultraconservador de Rupert Murdoch, dueño de The Times, Fox o The Wall Street Journal, con dudas sobre sus incompatibilidades. La sospecha de la génesis de un gran grupo mediático de la derecha se abortó con la absorción de Recoletos por El Mundo, líder del centroderecha desde 2007.
De la televisión para 45 millones de accionistas de Luis Fernández se ha pasado a la RTVE sin publicidad con un modelo insostenible, presupuesto insuficiente, oposición de las telecos a pagar y su financiación recurrida en Bruselas. Pero sobre todo con la incógnita de cómo sobrevivirá un servicio público que necesita redefinirse en la era digital.
#nolesvotes es el resultado de la insatisfacción de los internautas con la era Zapatero. El canon digital ha sembrado dudas y protestas desde su implantación, cuando el presidente llegó a calificarlo de patriótico. Europa lo declara ilegal y se impone una reforma que la ley Sinde ha impedido. Los partidos preparan sus propuestas para una nueva propiedad intelectual mientras los socialistas sufren el sambenito de la ministra del cine y la cultureta, dividida tras la dimisión de Álex de la Iglesia en los Goya y en plena reconversión de su negocio.
Los socialistas poblaron la blogosfera y quisieron crear un ciberpartido con un kit digital. Pero sus esfuerzos han quedado en caja de resonancia recurrente, poca imaginación y mucha autocomplacencia. Han perdido parte de internet cuando las redes sociales serán más importantes en las elecciones y el vídeo político manda en YouTube mientras se imponen cuotas electorales a los telediarios. Para los socialistas, la oposición digital es especialmente grave porque están en desventaja en los grandes medios.
El postzapaterismo tiene pendiente la banda ancha como servicio universal, una propiedad intelectual flexible y abierta para una sociedad de autores y prosumidores, conseguir que la innovación no dependa sólo de las subvenciones del Plan Avanza, desmontar monopolios y emprender el camino del gobierno abierto sacando del cajón la ley de acceso a la información.
Los medios se alinearán con los candidatos de las primarias mientras Intereconomía crea un nuevo poder en la derecha con La Gaceta y las nuevas televisiones locales son otro apoyo para el PP, dispuesto a privatizar las autonómicas.
80 céntimos, el precio de un café en el programa Tengo una pregunta, cifró la distancia entre Zapatero y sus votantes. Recuperó el debate electoral televisado tras un olvido de 15 años, pero la marca ZP hace tiempo que se fundió con una crisis que ha golpeado duramente a los medios.
Cuando se juega otra guerra del fútbol con las amenazas de huelga por el partido de los sábados y los diarios prolongan su crisis, Zapatero tiene por delante lo que agote de mandato para que las pantallas y el mapa de medios que dibujó se enamoren del futuro candidato. La marca ZP se desvaneció. Medios y ciudadanos esperan otra política y una vuelta a la ilusión tan necesaria para la videocracia.
Columna en Estrella Digital





