Arsenio Escolar recoge propuestas de moderadores para el debate electoral en internet entre Zapatero y Rajoy y la impresión es pobrísima.
De las 15 propuestas, 14 son habituales de la radio y la televisión, cuando no periodistas o presentadores de las televisiones que previsiblemente podrían estar haciendo de moderadores en los dos debates anteriores que PP y PSOE ya han comprometido.
¿Para eso necesitamos un debate en internet? ¿Lo importante es el moderador?
Entonces que siga en la televisión. ¿Cuál será la diferencia?
No. Lo importante no es cambiar el canal, sino los contenidos, las formas y el estilo.
De lo contrario, que se quede el debate en la televisión. Se ve mejor y la pantalla es más grande. Y además no dependes de que falle el ADSL.
En todo este revuelo por un debate electoral aparecen claras ya dos posturas que vale la pena separar:
1. Los medios digitales, encabezados por 20 Minutos, quieren acceso al debate y que el rendimiento de la presencia de los candidatos en la esfera mediática no se reparta sólo entre las televisiones.
2. Los partidarios de un auténtico ciberdebate, abierto y participativo. Un debate mejorado por las oportunidades de la tecnología y el acceso digital a la información.
A los primeros parece importarles sólo por ahora que Zapatero y Rajoy les den contenidos para sus pequeñas pantallas de vídeo, en streaming y para aprovechar en archivo.
Ni en las reflexiones de Arsenio Escolar ni en las de Juanjo Amorín, promotores del debate, encuentro ningún adelanto sobre cómo debe ser ese debate en la Red a pesar de las peticiones de los comentarios.
En el resto de medios, tampoco.
Una vez más los medios se equivocan.
El clamor por un debate más abierto, no sometido al bipartidismo virtual, con participación de los ciudadanos, es esencial si queremos mejorar la democracia.
Incluso para un mejor marketing de los medios digitales también es necesario.
De lo contrario parecerán redundantes, como el mismo debate. Si además es el tercero tras las televisiones, entonces mejor lo ahorramos y que simplemente las televisiones ofrezcan una señal abierta para todos, como propuso la Asociación de la Prensa de Madrid.
Un tercer debate no es necesario. Un debate abierto y participativo, sí
Actualización: Arsenio Escolar explica la exclusión de IU.