Un reportaje de la televisión autonómica TV3 sobre la blogosfera política catalana se centra en la estrategia de los partidos y avisa del crecimiento de los blogs anónimos. Saül Gordillo y Jordi Juan, periodistas de El Punt y La Vanguardia, alertan sobre un fenómeno que desplaza en parte a los medios tradicionales.
La confusión entre bitácoras y confidenciales renace y avanza como un nuevo fenómeno en Cataluña, donde hasta hace poco más de un año los digitales de cotilleo político no eran muy relevantes.

Son síntomas preocupantes. El oasis catalán siempre ha sido un prodigio de oscurantismo político bajo el manto transversal y protector del nacionalismo del bienestar -la autonomía como estado patrón y benefactor de Xavier Rubert de Ventós- pero la crispación avanza en Cataluña.

El PSC intenta traspasar la blogosfera el activismo cívico de tantos rendimientos pasados y Esquerra anima el debate con el ímpetu de sus bases y los viejos resortes leninistas reconvertidos territorialmente.
Extramuros del Parlament y las instituciones conviven colectivos sociales y cívicos diversos y una activísima Catalunya liberal, según la definición losantiana de la nueva derecha.
La crispación se aferra a la política catalana tras las tensiones del estatut. La explosión de blogs y confidenciales aúna en el ciberespacio la convivencia de un tejido ciudadano muy amplio y activo con la red poderosísima de los partidos y la política profesional catalana, la mejor financiada de España entre cuotas de afiliados (superiores a otras demarcaciones), asignaciones públicas por representatividad -local, autonómica y estatal- junto a donaciones privadas.
Poco a poco el ciberespacio catalán dibuja un mapa muy parecido al resto del tejido informativo e institucional de la comunidad.
Empezó siendo local, activista, cercano, y sobre todo, participativo. Pero el manto del poder, el partidismo y la propaganda es enorme y lo cubre todo. Hace unos meses analizaba el nuevo espacio de debate público y político catalán y me preguntaba si era realmente nuevo y más abierto e independiente.
Parece que está dejando de serlo. Experiencias como la blogocampaña de Ciutadans y la cibercampaña electoral pasada han descubierto a todos la utilidad de la blogosfera y el ciberespacio, también sin cortapisas ni límites para los partidos.
Y allá van. Lanzados con las armas de los viejos medios y el poder tradicional a costa de la participación ciudadana y la transparencia. El éxito de la blogosfera catalana anima los intentos de control de los partidos y la política profesional.
De bat a bat | Cíberpolítica catalana (i III)
P21 | La ciberdemocracia inunda las elecciones catalanas
P21 | La excepción blogopolítica catalana