El futuro de la televisión está en internet y en la convergencia de pantallas. Telecinco sigue explorando la convergencia vertical de todos sus negocios y el vídeo bajo demanda (vod) con el estreno de Ágora, la película de Alejandro Amenábar, en televisión y en el videoclub de Telecinco Cinema, la productora de la cadena.
Esta noche se estrena Ágora en televisión y en la web de forma simultánea. Más tarde se podrá ver en el videoclub de Telecinco Cinema por 1,42 euros pagados por SMS o con una llamada telefónica.
Telecinco desarrolla una forma de rentabilizar su catálogo en el vídeo bajo demanda a bajo precio, prácticamente la mitad del coste de estas películas en otros videoclubs online o en IPTV (televisión por internet).
Un desarrollo de negocio vertical y multiplataforma para explotar toda la cadena de valor del audiovisual: creación y producción, distribución y programación en cine y TV, y rentabilización del catálogo en una plataforma propia de vídeo bajo demanda.
Del cine y la televisión en abierto hasta la larga cola del catálogo.
Telecinco quiere mantener el control de la distribución, la vieja fortaleza de las cadenas anclada en el poder de las licencias. Ahora se trata de crecer a lo ancho (horizontalmente), con la absorción de Cuatro, y a lo alto (verticalmente) en todo el proceso y el mercado del audiovisual.
Llegar a todas las pantallas bajo la misma marca para no perder el liderazgo de hoy con más del 25% de la audiencia y el 44% de los ingresos publicitarios de toda la televisión.
Ni Netfflix, ni Hulu. El vídeo bajo demanda de Telecinco apuesta por la plataforma y la distribución propias frente a modelos como Netflix de alquiler de películas en streaming a través de una plataforma externa o Hulu, donde varias cadenas ofrecen sus series y programas como un agregador conjunto.
Las series y las películas de Telecinco están en su web cuando ya hay más de 19 millones de televidentes en internet y el consumo diario de vídeo en internet supera los 36 minutos.
Telecinco ha servido 25,6 millones de vídeos (streams) en marzo, según datos de comScore. Pelea con RTVE y su apuesta de vídeo a la carta y con Antena 3 por convertirse en la referencia en la internet TV. Un mercado y una audiencia que se ha disparado desde el segundo trimestre del año pasado, cuando la irrupción de los televisores conectados (directamente o a través de videoconsolas) y el consumo a través de móviles y tabletas como iPad han empujado una oferta que las televisiones han frenado hasta hace bien poco.
Pero la convergencia multiplataforma ya no es una opción. Es una necesidad de un consumo que no entiende de división entre pantallas, transparentes para los consumidores.