Estamos acostumbrados a sufrir los altos precios de muchos productos, sobre todo de importación. Nos ocurría en tiempos de debilidad de la peseta y también con el euro. Seguimos pagando más que otros europeos por los mismos productos. Uno de los últimos es el iPad.
Una comparativa de The Economist muestra que, a pesar de precios muy similares, un iPad básico de 16GB, de 488 euros, es más caro en España que en el resto de Europa.
Somos el cuarto país de los analizados en precio total (en dólares), pero al compararlo con el producto interior bruto per cápita, la menor riqueza de los españoles aumenta la carestía del aparato.
Sólo en países más pobres como China o México el iPad es más caro si se comparan sus precios y la riqueza de sus ciudadanos.