Friday, November 09, 2012

Estados Unidos vs. Europa: OTT frente a descargas


Una buena oferta de vídeo y entretenimiento en internet frena las descargas y gran parte de las quejas de la industria. El análisis de los mercados digitales de Estados Unidos y Europa muestra que la oferta de vídeo (OTT) y música (streaming) competitiva, eficaz y asequible cambia radicalmente el consumo de los usuarios tanto en líneas fijas como móviles.
El entretenimiento online es el 58,6% del total del tráfico digital desde conexiones fijas en Estados Unidos, con Netflix acaparando un 28,8% del tráfico total y un 33% del de bajada, dejando muy lejos a las descargas, con un 12% del tráfico, con BitTorrent acaparando un 10% del total.
En Europa la escasa y menos competitiva oferta, unida al bloqueo que televisiones y distribuidoras han conseguido imponer en muchos países, hace que el entrenimiento online sólo represente el 34,8% del tráfico mientras las descargas son el 20,3%, BitTorrent con un 14,9%.
Ese déficit de oferta de vídeo online (Over the Top) en Europa beneficia también a Google, que con YouTube acapara el 20% del tráfico total y la mayoría del consumo de vídeo.
Gran Bretaña, donde el mercado digital es mucho más competitivo, muestra que cuando hay oferta competitiva y bien promocionada, el usuario la adopta rápidamente. El streaming de BBC iPlayer consigue un 5,10% del tráfico total mientras Netflix y Lovefilm, los dos principales competidores comerciales de OTT alcanzan un 2,5 y un 1,46% del tráfico.

Los datos del análisis de tráfico de Sandvine vuelven a demostrar que la mejor política antipiratería es una buena oferta comercial. El problema, como siempre, es que para que cambie el mercado y el consumo de los usuarios debe haber una innovación disruptiva que irrumpa tan fuerte como Netflix en Estados Unidos. De lo contrario, las barreras monopolísticas y de los viejos mercados moderan los cambios pese a la igualdad en redes y dispositivos de acceso.
Por eso no tiene ningún sentido que los grandes distribuidores y las sociedades de gestión de derechos de autor sigan comportándose como monopolios que bloquean los nuevos negocios y aumentan el mercado irregular, con peor oferta para los consumidores y menor negocio para la industria. La contrapartida es el mantenimiento del control de los grandes, la vieja historia de los oligopolios.
Un problema que vuelve a ser de especial relevancia en España con la discusión de la nueva estructura del espectro radioeléctrico y el dividendo digital mientras esperamos una reforma de la Ley de Propiedad Intelectual de la que ya se filtran borradores inquietantes.
El estudio revela también diferencias de consumo interesantes entre ambos mercados. En el fijo en Europa hay mucho más tráfico web y de redes sociales mientras en ambos continentes el consumo de comunicación (Skype, videochats, etc.) es bastante estable, igual que el de plataformas de aplicaciones.


En el tráfico móvil se repiten las diferencias, el mercado de entretenimiento en tiempo real, sobre todo el vídeo y el streaming de música, acaparan la mitad del consumo, mientras en Europa es sólo un 34,2% y se mantiene un alto consumo de P2P, del 8,9%.
YouTube, con un 28% y la música de Pandora con un 4,74% del total del tráfico marcan la diferencia con Europa, donde los torrents son fuertes con un 6,82% del consumo y YouTube baja nueva puntos, hasta el 19%.
La otra gran diferencia es el mayor uso en Europa de aplicaciones y servicios de comunicaciones, de Skype a mensajes multimedia (WhatsApp y similares) para evitar los costes de telefonía.
El consumo de redes sociales también es mayor en Europa, un 14,6% del total frente a un 10,5% en Estados Unidos, con Facebook como acaparador de la mayoría del tráfico, un 13% en el Viejo Continente y un 7,95% en el americano.
Cuando se hace la proyección sobre el futuro del consumo aparecen tres grandes motores, tanto en fijo como en móvil: el vídeo en internet, el aumento de consumo en las aplicaciones (ahora mayor con la progresiva implantación de los nuevos sistemas operativos como Windows 8) y el crecimiento de la telefonía IP y las aplicaciones de mensajería.