Sunday, August 24, 2008

Un vídeo sólo para privilegiados

La manía del vídeo no es cosa sólo de internet. Quien tiene la imagen posee la cosa. Y como sabe cualquier programador de TV nada alimenta más el morbo que las imágenes de los alrededores de una tragedia. Si además su acceso es exclusivo, como rotulan tantas televisiones y medios, su taumaturgia enciende el ego de quienes las ven.
Por eso no es de extrañar que Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (Aena) haya premiado con ese privilegio al rey, al presidente Zapatero y a medio gobierno, así como a la presidenta madrileña Esperanza Aguirre, al alcalde Gallardón y a un sinfín de colaboradores.
A todos menos al juez responsable de la investigación, que ha tenido que reclamarlo.
Aena se escuda diciendo que se la envío un día después del siniestro de Spanair a la policía judicial y que se trata de un caso de incomunicación entre investigadores y juzgado.
Pero no es excusa.
Da igual si entregó o no el vídeo cuando debía. Aena debería ser más respetuosa con las víctimas, con la investigación y con los ciudadanos. El vídeo de las operaciones de los aviones es un documento técnico, no una curiosidad ni un entretenimiento. Y, por supuesto, nunca debe ser un privilegio. Si se entiende que puede ayudar a esclarecer los detalles del siniestro debe estar al alcance de todos los ciudadanos, y no sólo de los políticos. De lo contrario, se deben tener en cuenta las ansias de información y el respeto a los familiares, y las necesidades de la investigación.

Artículo completo en Soitu.es
Más en Soitu.es | La hipocresía del dolor