Las radios y la Liga de Fútbol siguen a cara de perro. La Liga quiere cobrar derechos de retransmisión, como a la televisión, y las radios se niegan. El Gobierno, por boca de la vicetodo Sáenz de Santamaría y del ministro de Industria, José Manuel Soria, promete una solución por el "interés general". La sombra de Álvarez Cascos y su declaración del fútbol de interés general se alarga.
¿El fútbol en la radio es interés general o puro negocio? Las dos cosas. A fútbol y cadenas más les vale ponerse de acuerdo.
El tonillo de los carruseles y el pitido de los goles son parte del paisaje sonoro del fin de semana. Para unos, un placer; para otros, una tortura de la que es difícil escapar. Del paseo con la radio de bolsillo en la mano hemos pasado al móvil con la información y los comentarios de los aficionados en tiempo real. El fútbol se sigue como nunca, pero el negocio flaquea por codicia, mala administración y un sistema injusto de reparto de los derechos televisivos que beneficia a los dos grandes.
Mediapro también posee los derechos de radio, como los de televisión, pero a diferencia de otros países, en España nunca se habían cobrado. La crisis del fútbol, con una deuda de los clubes cercana a 4.000 millones, 700 de ellos con el Estado, no debería frenarse castigando a los aficionados. Las radios, conscientes de los beneficios del fútbol, están dispuestas a pagar por los gastos que generan en los estadios y a los clubes, y buscan el amparo de los tribunales y el gobierno para frenar a la Liga.
Pero el fútbol profesional es un espectáculo y un gran negocio. Cuando se exprime demasiado se castiga a los aficionados y el negocio sufre, como ha ocurrido en la televisión. En la era de la información multimedia en tiempo real el carrusel del fútbol es imparable. Con retransmisiones en internet, vídeos y audio en cualquier dispositivo, los medios y la Liga deberían repensar el negocio y el servicio al público en lugar de empujar a una regulación legal que siempre irá por detrás de los intereses de todos.
Columna en los medios de Vocento