La batalla por control del salón
La sala de estar está repleta de cables, enchufes y dispositivos electrónicos. Cuanto más pequeñas son las salitas más se parecen a los cuartos de servidores. Frente a la pantalla sigue la familia y el mando a distancia otorga la tutela y el lugar preeminente.
El futuro digital pasa por el salón y el control del ocio familiar. Ese territorio es el campo de batalla de la televisión y el ordenador. Parece cada vez más claro que la televisión y el teléfono móvil han dejado sin sitio al PC en la salita. Con ambos y gracias a la ayuda de la televisión digital, la conexión de banda ancha a Internet, los dispositivos de transmisión y recepción de audio y video bajo demanda (VOD) hacen innecesario el ordenador.
El pasado año se vendieron 33,4 millones de descodificadores digitales y 3,8 millones de ellos incorporaban grabación de video digital –personal video recorder (PVR).
Las experiencias como Imagenio de Telefónica, televisión a la carta interactiva por ADSL, están destinadas a llevar la convergencia a la salita, donde el público familiar se concentra y donde la exigencia es mínima.
Los televidentes participan en los concursos del mando a distancia y en los mensajes por teléfono móvil de Gran Hermano, pero no parece que las ganas de interactuar con el televisor vayan más allá. Sin embargo, el matrimonio de teclado y pantalla, más allá del trabajo y el estudio, está cada vez más cerca. La televisión gana por el momento.