España ha superado el récord de calor desde 1961. De abril a noviembre la temperatura media ha subido más de dos grados centígrados. Sólo 2003 fue más caluroso que 2006. Este año la temperatura ha sido 1,46 grados superior a la media de los años 1960 a 1990.
Los datos del Instituto Nacional de Meteorología se suman a los de noviembre pasado, cuando se superó en un 20% la temperatura media.
Nuevos datos que se suman a las últimas alertas sobre el cambio climático y sobre el imcumplimiento del protocolo de Kyoto.
¿Seremos la civilización suicida que ha anunciado Jared Diamond en Collapse (Colapso)?
Posiblemente sí de no reaccionar. Del libro de Diamond lo más interesante es su discusión sobre por qué las sociedades avanzadas no reaccionan ante las amenazas ecológicas.
Las principales razones: a veces los problemas se perciben con demasiada antelación y los modelos de respuesta no son adecuados; en otras ocasiones falla la percepción del riesgo; cuando se percibe no se acierta a resolver y, por último, aún cuando se actúe a veces no se acierta.
Quizá el mayor problema es la tragedia de los recursos comunes, anunciada por Garrett Hardin y subrayada por Diamond: muchos individuos, colectivos, empresas e instituciones no actúan decididamente contra la amenaza ecológica porque "cada perdedor pierde sólo un poco y recibiría sólo pequeñas, inciertos y distantes beneficios" si actuase de otra forma.
Los "subsidios perversos" a actividades poco eficientes, el escaso control del consumo de energía o actividades como la minería a cielo abierto son atentados contra el patrimonio de todos. Además en muchos casos ahondan la brecha entre el mundo rico y los países subdesarrollados.
La discusión científica politizada sobre la realidad del cambio climático no ha ayudado.
Pero todos podemos rebelarnos contra un estúpido suicidio si hacemos algunas pequeñas cosas.
Como dice Diamond, la solución más práctica para la tragedia de los recursos comunes es la acción de los consumidores en su interés común de preservar los recursos con la mayor calidad.
Diamond confía en su poder porque al consumir somos un grupo homogéneo, capaces de comunicarnos entre nosotros y de organizar políticas comunes. Saber y voluntad colectiva. Pequeños esfuerzos en busca de bienes concretos, cotidianos, para una vida de más calidad. Compromiso y participación responsable y sostenible para reorientar el mercado y la producción de los recursos.
La Unión Europea da algunos consejos prácticos y en Movimiento Clima es fácil elegir cuánto implicarse.
P21 | Alerta sobre el cambio climático
