Wednesday, November 07, 2012

Gamificando las elecciones norteamericanas

Una tendencia sorprendió anoche en la cobertura de las elecciones que han dado a Barack Obama su segundo mandato: la gamificación de las elecciones para conseguir mayor engagement del público no ya con la escasa información disponible en los comicios hasta que cierran los colegios, sino para aprovechar las emociones políticas y convertir a los votantes y al público en sujeto activo y participativo del medio al que entrega su atención.
Junto a la gamificación destaco de la cobertura de ayer el triunfo del HTML5 y el Javascript para adaptar la web a los nuevos soportes móviles, como bien adelantó Alberto Knapp, fundador de The Cocktail. Pero también la vuelta de la fotografía al papel protagonista cuando diarios y aplicaciones para tabletas la vuelven a explotar con inteligencia y elegancia con la familia presidencial más fotogénica de la historia desde JFK.
The New York Times nos dejó boquiabiertos con The Words of a Nation donde una flashmob de ciudadanos rojos y azules como los partidos norteamericanos corría formando palabras para reflejar su humor y emociones el día electoral. Sutil, sugerente y elegante. Algunos no pudimos despegar los ojos de la parte superior de la home durante un buen rato. Absortos y esquivos del resto de la información. Con permiso de su otro elemento de participación: Instagram a todo voto.


En The Washington Post cada votante podía enorgullecerse y proclamar su voto -adiós al voto secreto en la era de las redes sociales- con un badge o chapa donde mostrar a su candidato una frase (un tuit) del porqué de su voto.
En ambos casos destaca la fiesta de la democracia en la era de la vida publicada. Nada de sostener el voto secreto, una democracia sin miedo proclama con satisfacción el sentido de su voto y sus razones. Todo un síntoma y argumento para pensar sobre la democracia y su tratamiento en la información.
Con el triunfo de Obama rivalizaron las nuevas pantallas. El presidente de las redes sociales fue ayer el líder de las tabletas. Muchos medios, encabezados por CNN, se afanaron por ofrecer su información en formatos adaptados para que nadie se perdiera un gráfico, una galería de fotos, un vídeo o una noticia por las incomodidades de Flash y similares.
CNN incluso cambió completamente su aplicación para tabletas con una capa de elecciones con diseño y estructura diferente a la habitual sin que los usuarios tuvieran que actualizar la herramienta. Un triunfo para las pequeñas pantallas.
Otra vez el poder de la fotografía. Todos los medios ofrecieron un recital impresionante de gráficos en tiempo real y visualizaciones de datos de gran calidad, aunque a veces algunos acabáramos empachados como el gran Alberto Cairo.
Pero las fotos volvieron a demostrar su poder -ahora democrático y distribuido- cuando la política es imagen, empatía y esperanza. En muchas portadas se puede ver esa preeminencia de la imagen fotográfica. Poderosa cuando tienes a un presidente como Obama con esa mujer que une maneras de reina del soul con la prestancia de mujer profesional e independiente, clave para la victoria de su marido.


Entre todas me quedo con The Washington Post por la sencillez, el poder y el contraste de la imagen del presidente y esa sutil cinta con los colores de los partidos que resume en un cintillo los resultados de la gran elección.Una portada de texto y foto. Pura prensa clásica. Sin complejos.


Entre las conceptuales, Businessweek llevando al futuro lo que muchos pensamos cada vez que miramos al presidente: ¡Cómo ha envejecido este hombre desde que fue elegido! Ahora vemos las arrugas de los próximos cuatro años.
Y para espectáculo, para ese gran entertainment que son siempre las elecciones norteamericanas nada mejor, otra vez, que la CNN y su infografía de luces sobre el Empire State. Pocas veces se ven tantos símbolos juntos de esa manida frase de la fiesta de la democracia.
That´s entertainment!!