Tuesday, July 01, 2003

ABC pinta los colores de periodismo


José Antonio Zarzalejos, director de ABC, defendió ayer en los cursos de verano de El Escorial la vigencia del modelo centenario del diario, anclado en su arraigo en la sociedad y en ser la conciencia colectiva de muchos.
Dijo que el periodismo son sus géneros, pues la forma está anclada en el contenido y una de las peores manipulaciones es contar diferentes realidades con los mismos lenguajes y palabras. Cada realidad necesita su estilo, su forma y sus palabras.
Los diarios monótonos no son sino falta de inteligencia o perversión totalitaria.
Una vez más, el director de ABC denunció el uso bastardo de la Red que hacen personas con intereses alejados de la información y que se aprovechan de las facilidades de publicación y difusión del ciberespacio.
Ángel Arnedo, director de El Correo, insistió en la credibilidad como patrimonio fundamental del periodista. Recalcó que el informador debe dejar que “los hechos hablen por sí mismos” y aludió a la necesidad de ampliar los espacios de libertad.
Arnedo se revolvió contra el uso obsceno del dolor –el amarillismo– como elemento informativo y sostuvo que como director le preocupan más los indefensos que los poderosos y los que manipulan su propia imagen. El deber de protección de los débiles debe ir más allá de la ley, recalcó.
José María Calleja, director del programa A debate de CNN+, defendió la beligerancia antiterrorista para contar la verdad, esa realidad que las mentiras totalitarias intentan enmascarar. Calleja insistió en informar con transparencia y de forma inteligible porque “la realidad es la fuente de información número uno”.
No se entiende, sin embargo, que en los colores del periodismo se cuenten espectáculos como Crónicas Marcianas, como hizo el jefe de Cultura de La Vanguardia, Llátzer Moix. Aseguró que hay una línea entre el periodismo y el periodismo basura, cuando lo que existe es un abismo entre el ejercicio de la información y el espectáculo.
Es preocupante oír a los propios periodistas hablar de periodismo para aludir a programas y contenidos como los mencionados porque al final alguien pensará que aquello es la realidad y Yola su mejor cronista.