Thursday, September 16, 2010

Champions de servicio público

Casi 5,3 millones de telespectadores disfrutaron de la victoria del Barcelona sobre el Panathinaikos en la vuelta de la Champions League a RTVE. Un regalo para sus patrocinadores, encantados de no competir con otra publicidad en la televisión pública sin anuncios. No acaparan tanta atención en los partidos emitidos por las autonómicas ni en los de pago por visión. Con el inicio de la Liga de Campeones vuelve el debate sobre el sentido de que las televisiones públicas gasten una parte importante de sus presupuestos en eventos deportivos deseados por las privadas.


Con la Champions RTVE se asegura audiencia, cumple viejos compromisos y vuelve a demostrar que su vocación todavía es comercial a pesar del fin de la emisión de publicidad. Y por tanto de la necesidad de competir con programas de máxima audiencia. Llama la atención de que RTVE justifique la emisión en la declaración de interés general de un encuentro por jornada de un equipo español –sólo a partir de octavos, según la ley- cuando nunca hasta el momento ha faltado ese partido en abierto por interés de las privadas. Algo que podría ocurrir si los precios continúan subiendo y la Champions sólo se emite en las autonómicas y la televisión de pago.

"El fútbol no es rentable para las televisiones a los costes actuales", sentencia Eduardo Madinaveitia, uno de los expertos en publicidad audiovisual más reputados. ¿Por qué entonces las televisiones públicas y la estatal sin publicidad pujan por los derechos? Es una vieja pelea en que privadas y públicas se acusan mutuamente encarecer el fútbol, para satisfacción de la todopoderosa UEFA.

La imprevisión de la nueva financiación de RTVE y de la Ley Audiovisual no ha redefinido el servicio público. Sobrevive la presión por la audiencia y el desafío de mantener el liderazgo. Los dineros de RTVE se van a la Champions cuando el Gobierno ya ha empezado a cobrar a televisiones y operadoras de telecomunicaciones la financiación de la tele estatal, todavía en duda por una investigación de la Comisión Europea y el mal año de la televisión de pago.

Columna en los medios de Vocento