Prisas. Todo en la reforma del estatuto de Cataluña han sido prisas. Cuando esta tarde se aprobará el proyecto definitivamente en el Senado, con la abstención de Esquerra, que pedirá el no en el referendo (obligación de las bases y codicia de poder), el presidente Maragall se adelanta tanto que hasta consigue que llegue a dos millones de hogares catalanes una carta del próximo día 12 pidiendo el sí al estatut.
Saül Gordillo no es el único sorprendido, como cuenta en su blog. Mientras, Maragall retoma con mayor fuerza el suyo para insistir en su incredulidad de que "un partido catalán se niegue a prestar apoyo a (...) el mayor proyecto de autogobierno que ha habido en Europa".
Prisas, adelantos y surrealismo político.
P21 | Maragall responde