The Christian Science Monitor será desde ahora
csmonitor.com, excepto por su edición semanal. Hoy publica su
último número diario en papel después de que
se le adelantase el Seattle P-I.
Pero
falta mucho para que otros diarios puedan pensar en convertirse sólo a internet. Fundamentalmente, más dinero para sostener el coste de la información y mejor rentabilización.